Poner atención a todos los patrones y a las anomalías que no encajan. La vida consiste mayormente en patrones y anomalías.
Los patrones son las estructuras generales, las cosas que esperamos ver porque las hemos visto suceder muchas veces anteriormente. De hecho, frecuentemente, nuestros cerebros adquieren naturalmente patrones y tendencias generales. Cuando tu ya sabes bien lo que debes esperar, tu estarás preparado para notar anomalías, las cosas o eventos que no encajan con el contexto.
Generalmente cuando nos damos cuenta de la presencia de alguna anomalía eso nos permite investigar más a fondo. Darwin, en su recorrido estudiando otras formas de vida, se dio cuenta de que había muchas variaciones menores entre especies diferentes de pájaros. Esto era inconsistente con su visión anterior del mundo de que todos éramos especies fijas que nunca cambiaban de forma. Él tomó esa anomalía y la investigó más a fondo, descubriendo la teoría de la evolución.
Los genios aprenden los patrones, las tendencias de un sistema, y si encuentran una anomalía no la descartan. Ellos se concentran en esa anomalía hasta que comprenden por qué pasó. Una anomalía inesperada frecuentemente conduce al gran inicio de un descubrimiento.